El año 2021 cerró con la friolera de 17.274 delitos y faltas relacionados con estos ataques a los legítimos dueños de todo tipo de viviendas. Esta cifra supera en 5.000 delitos las 12.214 okupaciones con las que terminó 2018, el mismo año en el que Pedro Sánchez aterrizaba en Moncloa. Dicho de otra forma, la okupación se ha disparado un 41% en los tres años del Gobierno de PSOE y Podemos.
Cataluña es la región que más está sufriendo la lacra de la okupación ilegal. Y es que, según los propios datos de Interior, la comunidad autónoma es la que aglutina el 42% de los casos denunciados. Gran parte de la explicación a este problema se encuentra en las propias leyes catalanas, que se han mostrado poco sancionadoras con esta práctica ilegal.
Soluciones para acabar con la okupación
La sociedad civil, desamparada por unos Gobiernos que deberían proteger sus derechos, está reaccionando a través de plataformas de afectados por esta canallada liberticida. Una de las iniciativas más significativas proviene del think tank Acción Liberal, que ha elaborado un estudio en el que propone diversas medidas centradas en dos aspectos fundamentales: permitir el desalojo inmediato de los malhechores y establecer la primacía legal de los propietarios como únicos titulares de un derecho constitucional que les ha sido violado.
Entre las opciones, se encuentra reformar el juicio verbal para que el propietario pueda recobrar de forma inmediata la posesión de un bien inmueble destinado a vivienda que ha sido okupado ilegalmente
Incrementar la respuesta penal en el caso de usurpación de inmuebles destinados a viviendas que no constituyan la vivienda habitual del sujeto, o elaborar un registro de viviendas okupadas a nivel municipal, o habilitar a los ayuntamientos al desalojo inmediato de okupas en un máximo de 48 horas, entre otras medidas.
Mientras tanto, lo mejor es aumentar las medidas de seguridad en tu vivienda o negocio para evitar la okupación ilegal. Ponte en contacto con nuestros asesores de seguridad en el teléfono 9141311401